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Una Ilusión

 

 

1. INTRODUCCIÓN 


Envueltas entre montañas, las comunidades de la Cuenca Alta del Río San Juan, en el oeste de la República Dominicana, parecen esconderse con timidez del resto del mundo.
No hay hospitales, no hay carreteras asfaltadas y, hasta el año 2011, la luz eléctrica no existía en la zona (hoy en día, solamente 4 de las 11 comunidades tienen electricidad).

 

La mayoría de los comunitarios beben agua en mal estado: los manantiales que rodean sus casas están contaminados. Por este motivo, enfermedades relacionadas con el agua no potable son muy frecuentes.
 

El “Cuerpo de Paz” y “Sonrisas y Montañas” trabajarán conjuntamente con los comunitarios para mejorar esta situación: reconstruirán un acueducto para llevar agua potable a las comunidades de El Ingenito, La Lima y Boca de los Arroyos.

 


2. DESCRIPCIÓN DE LA ZONA.


La Cuenca Alta del Río San Juan se encuentra en el oeste de la República Dominicana, en la provincia de San Juan de la Maguana. Allí viven más de 1.000 familias repartidas en once comunidades rurales: Majagual, El Ingenito, La Lima, Boca de los Arroyos, El Gajo del Bohío, Chicharrón, Guarda Raya, La Ceiba, La Higuera, La Ciénaga y Hondo Valle. Sin carreteras asfaltadas, sin agua corriente, sin hospitales.
La tasa de analfabetismo de la zona es una de las más altas del país. Mientras que en toda la República Dominicana el analfabetismo tan sólo está presente entre el 9,8% de la población mayor de 15 años, en la Cuenca Alta del Río San Juan prevalece en el 80% de la población, según datos de la oenegé local "FUNDASEP". Un estudio reciente del "Cuerpo de Paz" estadounidense señaló que más de la mitad de los adultos de estas comunidades nunca fueron a la escuela.

En la República Dominicana, la educación primaria y obligatoria tiene una duración total de ocho cursos. Sin embargo, las pequeñas escuelas de la zona sólo enseñan hasta el quinto curso. No tienen suficientes medios (profesores, aulas, material didáctico) para más. Desde el año 2012 Cristian Quezada (con la colaboración de "FUNDASEP" y otras organizaciones) dirige un colegio-internado donde los jóvenes pueden completar sus estudios. El centro está entre las comunidades de La Ciénaga y La Higuera. Reciben clases, comen y duermen todos juntos de lunes a viernes. Pero a pesar de estos esfuerzos, muchos continúan quedándose en casa.


En la Cuenca Alta del Río San Juan, el 75% de los hogares viven en situación de pobreza. La principal actividad económica de la zona es la agricultura, destacando los cultivos de habichuela y guandul. Prácticamente la totalidad de las familias dependen del cultivo de estas dos legumbres, aunque también suelen sembrar un poco de maíz, auyama o café. Debido a la falta de capacidades técnicas de los agricultores, esta actividad se realiza de una manera tremendamente agresiva con los recursos naturales de la zona, lo que está provocando un deterioro acelerado de la cuenca: pérdida de suelos, disminución de capa boscosa, desaparición de fuentes de agua, baja productividad... A esto se suma la debilidad de las organizaciones comunitarias de agricultores, lo que les impide enfrentar sus problemas y mantiene a la población en una situación de bajos ingresos y frustración permanente.

 


3. PRESENTACIÓN DE LA PROBLEMÁTICA


En las zonas urbanas de la República Dominicana, el 97 por ciento de la población tiene servicios de abastecimiento; y un 92 por ciento cuenta con conexiones domiciliarias. Sin embargo, la situación en las zonas rurales es muy diferente. Persiste una distribución desigual en detrimento de los más pobres: el quintil más rico tiene una cobertura de agua potable del 91,9 por ciento; el quintil más pobre, una cobertura del 48,9 por ciento.

Las comunidades de la Cuenca Alta del Río San Juan no tienen servicios de abastecimiento y, aunque existen varias fuentes de agua en los alrededores, la mayoría están contaminadas.


Adrián Ávila, miembro del Cuerpo de Paz de los Estados Unidos, ha demostrado que el agua de los manantiales que rodean las comunidades no es apta para el consumo humano. Esto es de gran preocupación, ya que sólo la mitad de los hogares purifican el agua que consumen (ya sea usando lejía o un filtro).


Los motivos de esta polución son las actividades mineras ―una empresa canadiense está realizando prospecciones en la cabecera del río San; dice que en la zona podría haber oro suficiente para abrir una mina― así como las malas prácticas agrícolas y otras actividades cuestionables.


Las enfermedades relacionadas con el agua son muy frecuentes en las comunidades de la Cuenca Alta del Río San Juan. La única clínica de la zona, construida y mantenida por una empresa minera desde el año 2012, se encuentra en Hondo Valle. Sus recursos son muy limitados: dos habitaciones, dos camas, pocos medicamentos. No recibe el apoyo del Ministerio de Salud Pública porque no es considerada adecuada para ofrecer servicios médicos.
Los casos más difíciles deben tratarse en el hospital de San Juan de la Maguana. Para llegar a San Juan de la Maguana desde Majagual (la comunidad más inmediata) es necesario realizar un recorrido en carretera con más de 35 kilómetros, tres de los cuales no están asfaltados; para llegar a San Juan de la Maguana desde Hondo Valle (la última comunidad) es necesario recorrer más de 100 kilómetros, 70 de los cuales no están asfaltados.

Las escuelas han reconocido la salud decreciente de sus alumnos y han comenzado a suministrarles medicamentos contra parásitos. En la zona hay un enorme interés para construir un acueducto para transportar agua potable hasta la comunidades de El Ingenito, La Lima y Boca de los Arroyos.

 

4. ENFERMEDADES RELACIONADAS CON EL AGUA


Diarrea: las diarreas pueden estar ocasionadas por virus, bacterias o protozoos que viven en el agua no potable. Las personas que sufren diarreas pierden líquidos y electrolitos, provocando deshidrataciones severas y, en algunos casos, la muerte: todos los años 1,8 millones de personas de todo el mundo mueren a causa de esta enfermedad; la mayoría ―más del 90 por ciento: 1,6 millones― son niños menores de cinco años.


Parásitos intestinales o helmintos: los parásitos intestinales afectan a más del 10 por ciento de la población de los países del Tercer Mundo. Según sea la gravedad de la infección, pueden causar desnutrición, anemia o retrasos en el crecimiento. Los niños son especialmente vulnerables a estos parásitos: alrededor de 400 millones de niños en edad escolar están infectados por ascárides comunes, tricocéfalos y/o anquilostomas.


Fiebre tifoidea: la fiebre tifoidea es una infección bacteriana provocada por la ingestión de agua o alimentos contaminados. Los síntomas son dolor de cabeza, náuseas y pérdida de apetito. Todos los años se registran 12 millones de casos de fiebre tifoidea.

Cólera: el cólera es una infección bacteriana aguda del intestino que, si no se trata de inmediato, causa diarreas incontrolables, deshidratación aguda y la muerte. República Dominicana estuvo libre de cólera durante más de cien años, hasta el 15 de noviembre del 2010. Desde entonces hasta el año 2012 se registraron en la República Dominicana 27.838 casos de cólera y 418 defunciones. El último brote en San Juan de la Maguana se produjo en septiembre de 2013.

 

 


5. OBJETIVOS DEL PROYECTO


Garantizar a los habitantes de la región agua adecuada para el consumo humano a través de la reconstrucción de un acueducto. El acueducto llevará el agua desde un manantial en las montañas hasta las comunidades de El Ingenito, La Lima y Boca de los Arroyos.

 


6. MÉTODO DE TRABAJO


El acueducto fue construido por la Cruz Roja Dominicana en el año 2001. En la actualidad, no funciona correctamente, necesita varias reparaciones.
La mayoría de las cañerías están rotas. Se reemplazarán las cañerías rotas y se reciclarán todas aquellas que todavía puedan servir.
Se construirá un embace con mayor capacidad que el anterior. El embace nuevo podrá almacenar hasta 36.000 litros de agua ―o 9.250 galones―.
“Sonrisas y montañas” y el “Cuerpo de Paz” se encargarán de conseguir los materiales necesarios, valorados en 147.501,97 pesos dominicanos (aproximadamente 2.834 euros).
Los comunitarios ―las personas que se beneficiarán de este proyecto― pondrán la mano de obra. De esta manera se favorecerá la cohesión de la comunidad y el trabajo en equipo.

 


7. FECHAS.
La reconstrucción del acueducto se inició en setiembre 2016 y se finalizó en noviembre 2016 en el momento en el que se consigan todos los materiales expuestos en el “Anexo 1”.


8. ANEXO FOTOGRÁFICO 

 

 

 

9. FACTURAS JUSTIFICATIVAS
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